Apuntes de una rookie mom

Mamá de varones

Volver…

en 5 de agosto de 2016

Vayamos por partes.

¿Por qué había suspendido el blog y lo había pasado a privado? En primer lugar, porque me venía haciendo ruido compartir información sobre mis hijos y sus vidas. Ellos empiezan a ser más grandes, tienen voz y voto y empiezan a reclamar potestad sobre sus vidas. Alvarito comenzó a reprocharme algunos avances sobre su vida privada y me di cuenta que bien podría ofuscarse si supiera que cuento cosas de él acá. Gerva es más chico, pero le cabe el mismo respeto. Y segundo, porque la verdad es que comencé a sentir que no sólo no a todo el mundo le tiene que interesar lo que tengo para contar sino que, más importante, a muchxs les causaba fastidio lo que contaba.

Así que me estaba quedando sin mensaje y sin destinatario. Este espacio, que tanto bien me había hecho en el pasado, estaba en terapia intensiva.

Hasta que pasó algo. Siempre hay alguien que conoce a alguien que conoce a alguien, y a mí me tocó toparme con una mamá como yo, con inquietudes e intereses como los míos, que pasó por las mismas cosas y que en su momento encontró orientación en mis palabras para resolver un conflicto con el que estaba lidiando. Y otra me pidió una guía de preguntas y respuestas que una vez había armado cuando me equivoqué de jardín y en menos de dos semanas cambié a uno mejor.

Así que encontré mi mensaje, mi voz y alguien a quien le interesa: tengo que hablar yo, hablar de mí, a mujeres como yo. Fácil.

Hago un recorrido relámpago por las cosas que pasaron mientras tanto (porque la vida son las cosas que pasan mientras el blog está en suspenso).

Tuvimos la valentía y la honestidad para reconocer que algo estábamos haciendo mal. Que la forma en que nos estábamos relacionando no era saludable, y que muy poco tenía que ver con la hermosa relación que a lo largo de tantos años habíamos logrado afianzar. Nos expusimos y nos entregamos. Comenzamos a trabajar sobre nosotros mismos y sobre nuestro matrimonio.

Por mi parte, yo misma tuve la valentía y la honestidad para hacerme cargo de lo mío. Me puse a trabajar con más compromiso sobre mí misma.

Acompañamos a nuestros chiquitos en la transición saludable hacia una nueva cultura familiar. Les cambiamos la vida, para mejor.

Pudimos desprendernos de la interferencia externa. De los problemas ajenos, de los conflictos del otro. Nos encapsulamos, nos encerramos en nosotros mismos y nos comprometimos en la epopeya.

Marian tiene esa frase hermosa de antología, que tanto me conmueve y que tantas veces cité acá: «Más seguros de nosotros mismos y con menos temor».

Tengo varias herramientas para compartir. Encontré muchos caminos novedosos que me sirven de mucho, que de a poco voy a ir mostrando por acá.

51IpjnZqGpL._SX331_BO1,204,203,200_Destaco todo lo que vengo leyendo sobre Positive Parenting. En particular, este libro de Rebecca Eanes: Positive Parenting: An Essential Guide.

Cuando me involucro con una determinada corriente, me gusta hacer previamente ciertos chequeos básicos sobre si existe una ética y una estructura de valores compartida, y que hable de cosas que resulten aplicables a mi realidad más concreta y específica. Un ejemplo rápido: a los 21-22 años, trabajando todo el día y cursando diariamente la facultad, estaba en un estrés tal que tuve un cierto problema de columna. Todavía me acuerdo como si fuera hoy, que una de las recomendaciones del traumatólogo que fui a ver había sido dormir entre 60 y 90′ de siesta diarios. Esa total incoherencia de fines a medios no me sirve. Me hace perder interés. Nunca fui muy teórica.

Este libro, muy ordenado, muy a lo yanqui, con esquemas, listas, bullets y lenguaje llano, me mostró una forma de conectarnos como familia que nos está haciendo mucho bien. Me ayudó a ver a mis hijos, a mi coequiper y a mi entorno desde un lugar completamente diferente. Pude encontrar la manera de deponer mis batallas y quedarme sólo con lo que me hace bien.

No tiene pretensiones. No transmite verdades reveladas. No hace alarde científico. Es un libro en el que alguien se propuso compartir sus descubrimientos en el derrotero de querer ser mejor mamá cada día.

Lo recomiendo.

En fin, esta es mi nueva versión. Este es mi nuevo espacio.

 

Anuncio publicitario

6 respuesta a «Volver…»

  1. Mora dice:

    Un gran regreso; palabras sin pretensiones y tan cercanas.

    (Te llame hoy pero estabas en una reunión. mañana pruebo nuevamente!)

  2. Flor dice:

    Ey! Bienvenida! Bien por el cambio, bien por el regreso, bien por el «temario».

  3. florseriayo dice:

    Me gusta tu vuelta (y tu vuelta). Welcome back!

¿Qué opinás?

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: